2018/05/24

Los sucesos de Flaubåter 1.

Ciudad de Flaubåter, con Kjopmanenes, Lukket Utpost y Båtområdet.

Los más odiados de Flaubåter

La aventura comienza en Nordhensum, cuando Alázatos y Eleim parten hacia Flaubåter por la vía del oeste, más larga y más peligrosa pero con servicios sensiblemente más baratos.
Les llama la atención que la barca lleva protecciones, el timonel les dice que no se preocupen, que a pesar de los ataques de las bandas de goblins, van bien protegidos por un vigía armado con ballesta.
Cuando empiezan a disfrutar de su cuarto y último día de viaje, y mientras observan los preciosos pájaros locales, el pequeño velero, a pesar de su corto calado embarranca en un arenal, entonces una flecha surca el cielo e impacta contra el vigía.
Son dos pequeños barcos de cometa de unos bandidos goblins que se acercan.
El timonel sube las defensas de barco y los viajeros se afanan a esconderse en el camarote, pero Alázatos y Eleim no se arredran y usando su poderosa magia destruyen las barcas atacantes y a sus tripulantes sin darles la mínima oportunidad.
Esa misma noche, en el Ósturhus, en el Båtområdet de Flaubåter, la noche empieza muy floja, no vienen clientes, Hvem y Dársien habrían cerrado de no ser por la reserva pagada por adelantado que tienen para una cena en la cubierta superior, los mejores platos y los mejores vinos, un importante cliente de Nordhensum se quiere dar un capricho caro.
La paz de la noche aburrida que empieza es interrumpida por un leve ruido en el piso de arriba, se saben en lo peor, Egóix Mil Hombres, un mafioso enano que controla Båtområdet, ha intentado cobrar la protección del negocio y después de muchas negativas viene a darles una lección.
Hvem trepa hasta la parte superior y se dispone a luchar contra un mafioso embozado de negro que pretendía sorprenderles, la lucha es dura pero después de unos momentos complicados, el elfo cocinero acaba con la vida del asaltante y lo tira al lago.
Por su parte, Dársien hace frente a otros dos bandidos que vienen portando un enorme madero que les sirve de parapeto y así se van acercando mientras les disparan flechas, detrás del escudo se encuentra el propio Egóix que abre fuego con una enorme ballesta. En cuanto los forajidos se encuentran a poca distancia Dársien deja de lanzarles cuchillos y saca su espada y su hacha, entonces ya no tienen más que hacer, la escaramuza se decanta del lado de los muchachos del restaurante y en su momento climático Hvem impone su voluntad sobre los mafiosos, insulta, amenaza y promete enormes males, así la banda de Egóix se retira con el miedo en el cuerpo.
Un rato después, cuando han limpiado los restos de sangre del piso de arriba, viene la guardia de la ciudad, con el mismísimo Capitán Spillt, hirsuto, desagradable y corrupto, a la cabeza. Se lleva el cuerpo del bandido y de paso les vacía la caja. El consuelo que tienen es que no había mucho que llevarse.
Mientras se están retirando los guardias llega el velero de Nordhensum con los clientes para la gran cena de esta noche, Alázatos, el bardo semielfo, y Eleim, la sacerdotisa griega.
Los curiosos que han ido llegando animan el ambiente y poco a poco se llena, no es una gran noche, pero la música melancólica del bardo animan el ambiente poco a poco.
Dársien tiene una extraña conversación con una elfa que se esconde tras una capa con capucha, bebe y deja buena propina, pero hay algo extraño en ella, no habla con Hvem y se interesa mucho por la posibilidad de que Dársien le lleve en su barco por la ruta del este, mucho más rápida y segura. Pregunta si conoce la ruta, Dársien es de las pocas que la conoce, pero su barco está fuera de servicio y no puede ayudarla. La elfa se va, pero a la marinera convertida en camarera le queda una extraña sensación.
La noche continúa y cuando ya se hace muy tarde solo quedan los clientes del piso de arriba que se resisten a irse y piden dormir en el barco.
A Hvem no le parece buena idea y se niega, un leve chapoteo en el agua, tal vez de alguna criatura marina, interrumpe la discusión y por fin los clientes abandonan el barco restaurante. Recogen sus cosas y salen por el muelle que lleva a la zona de hoteles, pero Alázatos se ha quedado con la curiosidad respecto al ruido se aleja muy poco a poco.
Mientras tanto, en el barco, los chapoteos se acercan y parece que algo va a pasar en cualquier momento, pero entonces los ruidos de cortan. Calma.
Al instante siguiente, como si fueran un solo hombre, cinco criaturas humanoides monstruosas con rasgos que recuerdan a peces o a ranas saltan al interior del barco, tres enormes Kuo Toa y dos Sahuagin se enfrentan a los camareros, Alázatos dirige sus pasos hacia ellos pero la refriega se inicia antes de que lleguen.
Los monstruos, en clara superioridad comienzan ganando y atrapan a Dársien con su red mientras Hvem es un torbellino de cuchillas.
Y están a punto de salirse con la suya hasta que llegan los refuerzos y decantan la balanza a favor de los héroes.
Pinchan, trinchan, matan hasta que Alázatos usa su conjuro de sueño y duerme a un Kuo Toa y a un Sahuagin, otros dos sahuagines logran escapar.
Frente al cadáver de la monstruosidad acuática y con las otras dos criaturas atadas termina la sesión, hasta otro lunes al rol.

2018/05/23

Los sucesos de Flaubåter 0


Reción de Røros, al norte del mar de Nordhensum.

Introducción:

El reino de Nordhensum, como tantos, está bajo la influencia de la Federación, Horo, el abuelo del rey Málmur tuvo que ceder a las presiones del pujante Imperio Griego Alejandrino y concederle un puerto a la Federación Griega de Comercio, pensó que lo mejor sería tener a los griegos lo más lejos de la capital posible y en una zona inhóspita, por eso les concedió un pequeño puerto natural en la desembocadura del complejo fluvial de Røros, una zona pantanosa de complicada navegación y que hace frontera con el reino élfico de Lukket Skog.
El rey elfo Høyetrēt es una persona imposible, no atiende a razones, no se comunica y utiliza la política de hechos consumados, guarda silencio hasta que lanza sus fuerzas especiales a dar respuestas desmedidas a los conflictos.
Entre el puerto de los comerciantes (Kjøpmanenes Port) y el puesto fronterizo de los elfos (Lukket Utpost) está Flaubåter, la capital de la región, una ciudad que se yergue sobre un inmenso bloque de piedra unido por dos puentes a cada uno de los lados del estrecho, dos terceras partes de su superficie son muelles flotantes y embarcaciones, es la ciudad con mayor diversidad étnica del reino.
Hace cinco años Giorgios Panayatos, el entonces apoderado de la Federación, quiso imponer su poder militar en Flaubåter para expulsar a los comerciantes elfos de la ciudad; el resultado fue una semana de luchas por toda la ciudad y una serie de asesinatos por parte de los cuerpos especiales de Høyetrēt que terminaron con la vida del líder griego.
Este hecho llevó al final de la comunicación entre la Federación y los elfos de Lukket Skog.
La gobernadora de la ciudad, Siv av Fryktelige Øyne (Siv la de los Ojos Terribles), sacerdotisa de Freya y hábil política creó una zona desregulada en los muelles flotantes, el barrio de Båtområdet. Allí se puede comerciar fuera de los cauces convencionales. El propio sector es una atracción para los viajeros ocasionales con locales de todo tipo y los restaurantes más pintorescos, como el Ósturhus, donde la comida moderna de mercado se mezcla con los cócteles más exóticos.
Ya hace una semana del solsticio de verano, cuando la luna azul tapó la luna roja y justo a media noche un ruido terrible, como si el propio continente se rasgase, procedente del corazón de Røros rompió el cielo, fue tal que se oyó hasta en Nordhensum.
Ese hecho debió afectar a los habitantes de la región porque las celebraciones del solsticio quedaron deslucidas, la apatía y el mal humor han afectado el comportamiento de las gentes, aunque afortunadamente los negocios poco a poco van recuperando su normal funcionamiento y la rutina vuelve a cubrirlo todo con su manto de normalidad.

2018/05/14

El bosque de Røros, parte 4

Por fin una sesión un poco más larga, casi dos horas, del tirón y sin descansos.

Las lágrimas de Tålvik.

Episodio 4: Desenlace.

Después de tres meses y medio, cuando lo dejamos en cliffhanger, se retoma la aventura para la batalla final.
Para hacerlo todo más interesante y dado que el grupo estaba separado, dibujé el mapa de la situación en las dos localizaciones en el mismo tablero y jugamos con las mismas iniciativas de tal forma que la situación se resolvía a la vez y no se quedaba nadie sin jugar.

Habíamos dejado a Serkiom y Pélegrin en el tabernáculo, los guardias les acababan de descubrir mientras el capitán de los trasgos (hobgoblins) había transformado el amuleto Tålvik al bañarlo en las lágrimas de los niños y la luz directa del doble eclipse de luna.
Mientras en el conjunto megalítico de la cima Silvana y Morgana contemplan al sacerdote duergar y su guardia realizar el ritual.
Y así empezamos.
El medio orco.
La druida y la exploradora bajaron hacia el templo inferior para unirse a sus compañeros y salvar a los niños, pero en su huída alertaron a los guardias que las persiguieron, plantaron combate que tardó en decidirse a favor de las jugadoras.
Mientras tanto, en el interior del tabernáculo, el bárbaro y el pícaro herían de gravedad al capitán mercenario que huía por la cuerda que sus compañeros le descolgaban desde el conjunto megalítico mientras sus guardaespaldas le cubrían la retirada. Los guardias sostuvieron la posición hasta que la furia de Pélegrin se desató y no hubo suficientes trasgos para pararle. Serkiom perseguía al líder mercenario pero la distancia era muy grande y las piedras que arrojaban lo hacían peligroso. Cuando el líder de los trasgos salió al exterior sus compañeros cortaron la cuerda arrojando a Serkiom al vacío, pero en ese momento el enorme Pélegrin ya había iniciado su escalada y atrapó a su compañero, juntos subieron por la chimenea hacia el exterior.
Afortunadamente para cuando el capitán mercenario lograba salir Morgana y Silvana volvían a la cumbre y cubrían la salida de sus compañeros.
Entonces el sacerdote duergar llamó a los murciélagos gigantes que estaban en el almacén y se disponía a la batalla contra los intrusos.
Pero entonces salieron del pozo Serkiom y Pélegrin y reforzaron la posición de sus compañeras.
El sacerdote duergar nada pudo hacer contra la fuerza combinada de los héroes, y tanto él como su guardia perecieron, pero no antes de herir gravemente a Serkiom.
Con figuritas se entiende todo mejor.
Silvana había logrado usar su magia con Pélegrin in extremis para concederle fuerzas extra en el último momento o habría caído también.
Mientras tanto, Morgana hostigaba con sus flechas al líder de los mercenarios que se aprestaba a montar sobre una de las enormes bestias voladoras. Morgana, a quien le había costado encontrar las fuerzas, estaba en una racha mortal, pero el capitán de la horda impía estaba lejos y a punto de escapar, una última flecha, en la última oportunidad y cuando ya había abandonado la fortaleza de los Tålvik, acabó con su vida y lo arrojó al barranco.

Entre todos estabilizaron a Serkiom pero vieron con decepción cómo el medio orco que había logrado escapar del bárbaro rescataba el amuleto y huía por el barranco de Ugle Bjørn en dirección a Flaubåter.